Anfama…Septiembre 2015

El Viernes 18 de Septiembre, un poco medio a las apuradas, pude terminar de preparar la bicicleta y el equipamiento necesario para el viaje.  Mi hijo me llevó a la terminal de colectivos de Santiago del Estero, llegué 5 minutos antes de las 17:15, horario de partida del colectivo hacia San Miguel de Tucumán.  Por suerte no me hicieron mucho problema para cargar la bicicleta en el colectivo. Generalmente la empresa La Unión, nunca no hace problemas para el traslado de la bicicleta.

Se me hizo larguísimo el viaje, creo que la falta de costumbre de viajar en colectivo. Llegue cerca las 20:00 hs. Cargué la alforja en mi bicicleta y como quien pedalear me fui hasta el dpto. de mi ahijada Carolina donde pasaría la noche para salir al otro día bien temprano.

A la noche salimos a cenaimg_20150919_071430257r con Caro y Diego unas riquísimas milanesas, al regreso termine de ultimar detalles para partir al  día siguiente bien temprano.

El Sábado 19, me levante a las 6 AM un suculento desayuno, acomodé los últimos detalles y tipo 7:30 AM, me pasó a buscar Luis, mi fiel compañero de viajes.

 

Partimos en busca de alguna estación de servicios donde podamos desayunar nuevamente, como para reforzar. Luego del mismo, pedaleamos por una avenida que nos depositó en la ruta nacional nro. 9.

Ya en la ruta debíamos hacer unos cuantos km sobre la misma, un  tanto peligrosa para mi gusto, los automovilistas no nos respetan para nada  a los ciclistas. Íbamos en fila y con todos los sentidos bien atentos sobre todo el auditivo, el que iba atrás pegaba el grito ante la aproximación de un vehículo y a la banquina se dijo.

En el camino encontramos tres ciclistas tucumanos, con los cuales fuimos juntos hasta Raco. Muy buena onda los changos, todo era pedalear y reírse de las cargadas entre los mismos. Nos despedimos de los changos, y seguimos con Luis hasta el Syambon, el camino se tornaba con pequeñas subidas y bajadas.

legamos cerca el medio día, al camping un lugar muy lindo para parar. Si algo tenemos en común con Luis es que cuando llega la hora del almuerzo o cena se para donde sea.

Luego de la cargar energías con una riquísima milanesa a la napolitana con papas fritas y una muy buena hidratación con un par de stellas, cerca las 14 hs salimos a encarar la etapa más dura del primer día, unir el Syambon con Anfama por el camino más alto, como le dicen por la zona por el camino largo.

La primera parte del camino, era transitable con subidas sin descanso. Hay dos subidas bien pesadas entre las dos se sube 1200 m en 20km. En el camino nos alcanzaron 3 bikers por el ritmo que imponían eras de la elite del MTB.

Seguimos pedaleando, el camino ya no estaba tan firme, en muchas partes del mismo esta derrumbado y no se podía pedalear había que bajarse de bicicleta. Finalizando la primera trepada, comienza una bajada que te deposita en el rio, si bien tiene mucha inclinación no pudimos aprovecharla con velocidad dado el estado del camino, es más se tornó medio peligroso por la cantidad y el tamaño de las piedras, en vez de descansar en la bajada nos cansamos más.

Hasta aquí la cosa venía bien, de buen humor, un poco cansados pero nada que no se podía manejar. Cruzando el rio ahí no más comienza la segunda trepada, y el camino en muchas partes en muy mal estado, no se podía pedalear. Combinamos caminata y pedaleo hasta llegar a un lugar realmente hermoso que solo hay una casa y un caño de agua potable, Altos de Anfama.

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Cargamos agua y emprendimos la pare final para llegar a destino. Saliendo de altos de Anfama comienza una hermosa bajada que te hace ilusionar que todo será así hasta el final y nada más errado. Finalizada la bajada que crea falsas expectativas comienza la última trepada que nos depositará en Anfama, el cansancio se hacía notar y mucho, la temperatura bajó considerablemente.

Pedaleando ya con las ultimas energías, con pendientes que comían nuestras piernas llegamos a un punto donde Luis me dice mira hay esta la cruz de la iglesia de Anfama, ya estamos me dijo. Que alegría me vino… ahí me di cuenta que estábamos fundidos. Esa imagen nos dios las energías suficientes como para llegar.

 

Recién llegaditos en la entrada del hermoso pueblo de Anfama. Un día hermoso haciendo lo que nos gusta, pedalear y conocer lugares más recónditos de nuestra argentina, no importa el cansancio siempre se puede, siempre Dios nos acompaña.

Llegamos al lugar de nuestro alojamiento, a una casa de familia, gente tan maravillosa como su pueblo. Luis ya era habitué de ahí, fue unas cuantas veces haciendo trekking desde Tafi del Valle.

Estacionamos nuestras bicicletas, bajamos las alforjas y no pegamos al lado el fuego, estamos con mucho frio. Lilia nos preparó un matecocido con tortilla a la parrilla y empanadillas de cayote, riquísimos.

Entre charla y charla con Kike y Lilia deliberamos que cenaríamos, quedo como menú guiso de arroz con gallina….

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Luego de un baño de agua caliente muy muy reparador, nos acomodamos en la pieza que nos prepararon y ahí el gran esfuerzo comenzó a pasar factura a las piernas de mi compañero Luis, los calambres lo tenían a mal traer, pero tipo duro si los hay se las banco como siempre….

Llego el momento de la cena, guiso de arroz con gallina y un fernecito para acompañar y compartir con Kike y lilia. Con la panza llena y el corazón contento nos fuimos a descansar, al día siguiente deberíamos volver a S.M. de Tucumán.

Bien temprano, ya con las energías renovadas disfrutamos del paisaje, la tranquilad de la montaña y el aire puro.

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Luego de un suculento desayuno con tortilla a la parrilla y matecocido, ultimamos detalles y partimos. Estaba fresco, pero de entrada no más empiezas a subir como quien entrar en calor.

Hasta llegar al río grande, no es tan exigente es más bajada que otra cosa, ahí pude disfrutar de la bajada y un poco exigir la bicicleta como me gusta. Al llegar al río el sol ya pegaba demasiado así que me saque un poco de ropa y comenzamos a bordear el mismo.

Con la inusual creciente del pasado mes de marzo, había destruido los caminos que lo flanqueaban, convirtió, lo que debía ser una entretenida pedaleada, se convirtió en un constante caminar entre las piedras, alternado con 10 o más cruces del cauce.

Cruzamos uno grupo grande de chicos que hacen trekking, seguimos hasta el puente donde está el camino que no lleva al syambon.  Nuevamente paramos en camping para almorzar y así continuar con los 60 km que nos quedaban hasta S.M. de Tucumán.

Rico almuerzo y a continuar pedaleando, llegamos muy rapido hasta el cruce que lleva al valle de La Sala es rapidísimo (68.4 kmph!), pero apenas cruzas un puente sube, sube y sigue subiendo, hasta que llegas al poblado de La Sala, donde baja lindo … y ya estaban en el valle.

A este punto la intención era SUBIR (ooootra vez!) hasta el Cristo de San Javier para llegar bajando a Tucumán. Las fuerzas eran, ya no escasas, sino casi inexistentes… y ya se preveía una llegada nocturna al destino …

 ENTONCES …
pasa furgoneta, toca bocina, saludamos, furgoneta se detiene … «para donde van muchachos ?» … «esteee, para Tucumán, pero si nos dejas en el Cristo !»
El chofer comentaba que su padre es también fanático ciclista, que haciendo un bien hoy, se puede cosechar otro mañana … se llamaba Fernando, le pusieron «Fernando Salvador».

Y bueno, una vez ubicados en la rotonda de San Javier, el trámite final fue largarse desde allá arriba hasta Yerba Buena y por la Avenida Aconquija, luego Mate de Luna llegar a destino casi sin pedalear.

Anfama, un lugar verdaderamente bello… Su belleza natural y aire puro transmiten una paz inimaginable, dan ganas de quedarse a vivir ahí. Hasta la próxima.

Las Estancias… Enero 2014

Dia 1

Monteagudo – Las Estancias

Salimos desde Santiago del Estero, en mi Kangoo con los dos choferes, Santi mi hijo y Álvaro un amigo, Luis y yo en calidad de ciclistas. Llegamos hasta Localidad de Monteagudo sobre RN 157 en Tucumán. Ahí armamos las bicicletas, cargamos las alforjas y salimos con destino a Concepción distante a unos 40 km de Monteagudo.

Hicimos una parada, un fuerte desayuno y tipo 10 am. Seguimos pedaleando hasta Alpachiri en busca de la cuesta del clavillo y posteriormente Las Estancias.

Comenzamos a sentir mucha húmedad ambiente, el aire quieto, provoca que el cuerpo, sometido al esfuerzo de pedalear, trate, por medio de la transpiración, de refrescarse…
El exceso de transpiración puede conducir a una seria deshidratación, la cual podría inhabilitarte para cualquier actividad física, salvo período de recuperación de varios días.

Esto NO puede suceder el primer día de un viajecito en bicicleta. Fue así que, con Luis nos hidratamos convenientemente durante toda la jornada.

Pedaleamos por medio las yungas tucumanas que asombra por su densidad, muy cerca de los campos donde se imponen las plantaciones de cítricos y caña de azúcar. Es verdaderamente hermoso pedalear por ahí se disfruta cada tramo del camino.

Un magnifico camino de cornisa se interna por la Sierra del Aconquija para desembocar en La Banderita, el punto más alto del día, 1890 msnm. Lamentablemente semi-cubierto de nubes el cielo, nos impidió disfrutar de la vista del Nevado del Candado hacia arriba y del serpenteante río Cochuna hacia abajo.

Pero el paisaje nos dio revancha apenas iniciamos el descenso hacia el Valle del Aconquija (Las Estancias, que le dicen los tucumanos). Había sol !.
Breve parada en las cabañas de Yunka Suma para recobrar alguna prenda olvidada por mi amigo y compañero de viaje Luis.

Un poco más adelante llegamos al río Potrero y apenas cruzar el puente inauguramos (cicloturisticamente hablando) un lindo pavimento que une a todos los pueblos del valle.

Supuestamente era todo bajada hasta el hospedaje, pero nuevamente una mentira piadosa de mi compañero. Un falso llano que pica y pica para arriba, alguna bajadita y varios repechos, cortos, pero picantes. Lo retaba a  Luis «NO ERA TODO BAJADA !!??»

Luego de una breve pero eficaz parada en Alto de Las Juntas para tomar un Gatorade, ya venía con la fundición encima, continuamos hasta El Alamito, llegando a El Fortín de Jorge. Baño, breve descanso y caminata de 1.5 km hasta el restaurante donde cenamos y tomamos un par de cervecitas.

Repaso del día: Sacrificado, pero muy satisfactorio.

Dia 2

Las Estancias – Balcozna

Al día siguiente estábamos listos para partir a las 8am. Salimos a la calle para comenzar el pedaleo y observando, hacia el oeste, el rumbo que deberíamos tomar, una cortina azul ocultaba las alturas de Cóndor Huasi …

Próximo horario de partida, 10am, vamos a seguir durmiendo. A la nueva hora señalada, idéntico panorama, con el agregado de que en El Alamito llovía. Mientras esperábamos el almuerzo, cervecita mediante, veíamos con preocupación las encrespadas aguas del río Del Campo, que pasaba casi por los fondos de El Fortín.

Después de almorzar, como a las 14 horas, el río ya se había amansado bastante, la lluvia había cesado y se podía divisar claridad en la lejanía, mirando hacia el oeste. Entonces, iniciamos la marcha.

Cruzamos el río Del Campo, un poco más allá de Buena Vista, caminando para evitar posibles inconvenientes, luego, unos pocos km más y cruzamos un afluente de este río y ya continuamos tranquilos de saber que no quedaba otro obstáculo similar en el camino.

El camino hasta Cóndor Huasi es duro, muy … pero las vistas del Valle del Aconquija son espectaculares. Vale la pena el sufrimiento. Lindo colectivo va y viene desde San Fernando del Valle de Catamarca hasta Las Estancias … lo vimos pasar de ida y de vuelta … no le hicimos señas, creo que ni lo saludamos, en parte por no tentarnos. La jornada era agobiante, no por la temperatura o la humedad, sino porque el recorrido tiene duras pendientes seguidas de bajadas y luego sube y luego baja … y así

El horario (recordar que veníamos demorados por 6 horas), nos apremiaba, la tarde ya terminaba, así que apuramos el trámite para llegar a Singuil. Y lo pasamos a Singuil, cruzamos el río Singuil y sobre pavimento iniciamos el ascenso a la Cuesta de Singuil.

En el ascenso a la cuesta de Singuil, la noche no demoraría en llegar. Diosito no mando un par de camionetas, una de las cuales no quiso levantarnos y la 2da muy amablemente un señor y su familia, nos cargó y nos acercó hasta las Higueritas

Pasada de manera poco honorable esta cuesta, agradecida la ayuda recibida, nos encaminamos hacia nuestro destino del día:  Balcozna. Llegamos pasada las 21 horas. Otra vez, trato amable, baño, breve relax y a buscar donde cenar. Sencillo lugar sobre la calle principal, frente al rio, que hacia ruido, alimentado por las recientes lluvias. Mientras le dábamos a un riquisimo locro de choclo, previas empanadas fritas, se largó a llover. Así que para no mojarnos, esperamos a cubierto un rato, mientras bajamos 2 cervecitas más. Salud !!

Párrafo aparte para el manejo de distancias que tienen los lugareños, 1 km pueden ser 5, 15 km seguro son 30. Ni uno solo de aquellos a quienes consultamos distancias nos supo dar un dato cierto. Lamentablemente siempre erraban por mucho menos.

Dia 3

Balcozna – Lavalle

El tercer día arrancó diáfano, sol casi a pleno, vientito fresco, hermoso para pedalear más por esa ruta que ya la había hecho en auto con mi mujer. Se va rápido bastante, no produce desgaste al pedalear.

En La Merced hicimos una paradita para tomar una gaseosa y comer alguna de las provisiones que llevamos.

Cuesta del Totoral, 5 km de subida, camino anchisimo, con ciclovia. Pedaleamos parejo hasta llegar a Los Altos.

Buscamos donde almorzar y mientras le dábamos al diente y al escabio, Luis trataba de encontrar algún amigo que nos busque desde lavalle.  Ernesto Escobar, apodado inmediatamente como el salvador nos buscó cerca de las  17hs.

 Y así fue, con vientito a favor hasta Las Cañas y 2 pinchazos mediante, llegamos a la YPF de Lavalle apenas 5 minutos antes que Ernesto y su auto con porta-bici. Tomamos algo como para recuperarnos un poco y desde ahí, regreso a Santiago en vehículo motor.

Una aventura más, que tuvo casi todo lo que un buen viaje cicloturista debe tener, problemas, paciencia, empeño, sacrificio, alegrías, satisfacción de la buena compañía, también buena comida. Completito.

Gracias Luis. Hasta la próxima. 

 

Todas las Fotos del Viaje AQUI….

Desafío Ruta 40…

Día 1

(La Quiaca – Humahuca)

El día Jueves 03/01/2013 llegamos a la Terminal de Santiago del Estero, con nuestras bicicletas todas embaladas en cajas que nos facilitó Carlos Najar de Bicper Banda, alforjas, carpas, bolsa de dormir, caja de herramientas y cocina. Muy ilusionados por empezar a transitar este viaje que lo preparamos todo el año 2012. Estábamos un tanto preocupados y  con un poco de temor por no saber si cargarían las bicicletas en el colectivo, le dimos una buena propina al chango que acomoda las cargas y por suerte no pasó nada más que un rezongo de los choferes.  A la partida nos acompañaron agustin, chiqui, Nahuel y rosi,  Salimos con toda la ilusión a cuesta de lograr lo que habíamos planeado tanto.

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El colectivo salió con una hora de retraso y en termas de Rio Hondo se rompió. Tuvimos que bajar todas las bicicletas dado que la caja de herramientas que los choferes necesitaban para arreglar el mismo estaba justo detrás de nuestras bicicletas ese inconveniente nos sirvió para que los choferes no nos miren con cara de enojados, conversamos con ellos y le contamos lo que estábamos por hacer ante lo cual la expresión de ambos fue…. “tan en pedo ustedes…”. Dado el inconveniente perdimos una hora más, no era la mejor manera de comenzar pero pusimos buena onda ante los imprevistos.  Superado  el percance el viaje fue tranquilo en sí, nos bajamos en Jujuy capital a comer algo y no paramos hasta La Quiaca, Llegamos cerca las 8 de la mañana, nos movíamos despacio como buen santiagueño y como para que los efectos de la altura no se hagan notar. Armamos las bicicletas cada una con su equipamiento y fuimos a desayunar para luego partir hacia Humahuaca.

En el bar nos cambiamos, pasamos de civil a biker o payaso, compramos unas pastillas de ajo para mejorar la oxigenación. En el momento de partir se acercó una señorita de radio nacional de La Quiaca y nos hizo una entrevista para la misma. Hicimos una cuadra y nos agarraron los de la TV, muy solicitados los santiagueños…., nos hicieron una muy linda entrevista la cual está en youtube. (https://www.youtube.com/watch?v=VjgMHnGD2IM)

Desocupados de los periodistas y fotos en el tradicional cartel de La Quiaca partimos hacia ABRA PAMPA, 11:00 hs aproximadamente, supuestamente “TODO BAJADA….” Pero…. a golpe se hace el hombre y de los errores se aprende y mucho. Partimos de La Quiaca en 3445 msnm, llegamos a abra pampa en 3484 msnm a las  15:30 aproximadamente, el viento, la puna y la pendiente en contra nos demoró mucho más de lo esperado. El hambre no se hizo esperar comimos unos fideos riquísimos y nos hidratamos muy bien en un bar del lugar.  Al momento de salir una tormenta nos demoró más aun, esperamos que pase un poco para emprender la supuesta “TODO BAJADA” hasta Humahuaca.

Comenzamos la pedaleada hasta Humahuaca y la ruta seguía pesada, veíamos que era cuesta arriba pero no entendíamos porque todos nos decían es “TODO BAJADA”, comprobamos doblemente nuestro palpito de que no era “TODO BAJADA” cuando encontramos un cartel cerca de un pueblo llamado tres cruces que decía 3780 m. Continuamos nuestro rumbo hasta humahuca se hizo de noche, si bien teníamos luces no eran suficientes al menos las mías como para pedalear tranquilo, mucho temor a que nos choquen, llegamos demasiado cansados tipo 22:30 hs. Ahí nos esperaban Mauricio y Cintia de la hostería coquena. Excelente y cálida atención. Preparamos unos fideos con queso y nos fuimos a descansar para emprender al otro día HUMAHUACA – PURMAMARCA esperando que realmente sea “TODO BAJADA”……

Km pedaleados: 160 km

Más Fotos del día 1….




Día 2 

(Humahuca – Purmamarca)

Recuperados del agotador primer día de pedaleo, salimos tipo 9 de la mañana hacia Tilcara, la ruta bastante tranquila, paramos varias veces, la primera fue para que una llama lo haga asustar al negro…. La segunda en Uquia y luego en el trópico.

Ahora si era casi “TODO BAJADA”….  Llegamos a Tilcara tipo 13:00 hs compramos un poco de fiambre con bebidas y fuimos la plaza a almorzar y disfrutar del día…. Luego emprendimos los últimos 20 km hasta Purmamarca y apareció el maldito viento que nos hizo gastar más energía de lo debido, llegamos y nos alojamos en la hostería Sabor a Tierra.

Salimos a matear a la plaza previo baño, como quien apreciar los hermosos y variados paisajes que ofrece la bella Purmamarca…  Hicimos las compras respectivas mucho líquido y comida dado que al otro día nos esperaba el primer gran desafío “La cuesta del Lipan….”. Encontramos unos chicos de Bs. As.  Con los cuales charlamos amable y largamente. A la noche como para que no nos caratulen de aburridos fuimos a un pub, un grupo de Jujuy le puso un condimento especial a la noche, donde las charatas compartieron cerveza y una coca sin saber lo que nos esperaba al otro día….

Km pedaleados: 70 km

Más Fotos del día 2…




Día 3

(Purmamarca – Salinas Grandes)

Salimos 7:30 de la mañana para emprender el primer gran desafío, la cuesta del Lipan a 4.170 msnm. Debíamos subir 2000 m en 40 km aproximadamente. Apenas salimos el aliento de un grupo de chicas no se hizo esperar, a los 30 minutos de pedaleo nos encontramos con dos chicos franceses Emanuel y Roman, emprendimos juntos la gran trepada, ellos, los franceses muchos más jóvenes tenían un ritmo diferente, nosotros conservamos el nuestro.

Durante la pedaleada íbamos ganando altura por un camino que atraviesa caseríos como Quisquira, Patacal y La Ciénaga hasta dar con la sinuosa Cuesta de Lipán. El serpenteante camino asciende en espiral la Cuesta de Lipán hasta los 4170 m.s.n.m., donde el cielo cristalino se entremezcla con la escarcha y los pastizales del sector. 

Cada metro se tornaba más y más pesado, lo hacíamos con un promedio de 6 km por hora. Alrededor  había varias nubes amenazantes, cerca las 3 de la tarde nos agarró la tormenta. Por suerte encontramos un campamento de vialidad donde los obreros muy amablemente nos dieron refugio. Luego de una hora de espera en el campamento la tormenta se fue y retomamos la ruta, subíamos, subíamos y no llegábamos a  la cima, el agotamiento ya estaba a flor de piel, los chicos de Francia decidieron quedar en un refugio, nosotros convencidos que estábamos cerca la cima continuamos y luego de unos minutos llegamos a la cima de la cuesta del Lipan. 

 

En ella encontramos una familia de Usuahia, con los cuales nos sacamos unas fotos y emprendimos la bajada dado que se venía la noche y el frio estaba castigando duro. La bajada hermosa dado que el piso se presta para bajar rápido, pero el viento nos jugó una mala pasada, deberíamos llegar a un caserio llamado 3 morros pero la noche y el cansancio se nos vino encima, encontramos una casa casi justo en el cruce de rutas de la 52 con la 40, ante lo cual no dudamos en ir a preguntar si nos dejaban poner la carpa en algún lugar, el viento era de terror, la familia Alancay nos brindó todo su hospitalidad ante lo cual estaremos eternamente agradecidos.  

Las Salinas tienen una altitud promedio de 3450 msnm. Pese a lo elevado de tal altitud, las Salinas Grandes de Jujuy son prácticamente el nivel de base de una cuenca que se continúa hacia el norte en la Laguna de Guayatayoc. Personalmente me resultó complicado dormir en la altura, cada tanto me despertaba de noche con falta de aire, pero como siempre sostuve, Dios nos protegió para que podamos seguir adelante.

Buscamos un lugar que nos proteja del viento, armamos la carpa rápidamente y adentro se dijo….  Unos fideos nos acompañaron, al otro día nos espera unos 100 km por la ruta 40 pero sin trepada confiábamos que podíamos hacerlo durante las horas de sol.

Personalmente después de haberla recorrido en auto y en bicicleta debe ser una de las rutas muy bellas por donde he andado, en donde la sucesión de paisajes y de colores, verdes, rojizos, grises, marrones y amarillos no dejan de sucederse y recrean la visión de quienes la contemplan. Combinado este paisaje con la infinidad de curvas y contracurvas que tiene la Cuesta del Lipán podemos decir que es uno de los escenarios naturales más bellos que tiene el Noroeste Argentino. A lo largo del camino nos acompaña la inmensa geografía de las montañas y del Río Purmamarca que deja como testigo al desnudo su lecho.

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La Cuesta del Lipán es realmente una belleza increíble y su vista incomparable. Antes de llegar al punto máximo nos detuvimos en un mirador del cual se puede apreciar la sucesión de curvas a lo largo de la montaña. Luego de unos quinientos metros más cuando ya no se puede divisar la inmensidad del camino llegamos al hito de mayor altura (4170 metros). Desde allí se divisan un sinfín de montañas que se suceden una tras otras. Unos metros más, ya bajando la cuesta, nos encontramos con formaciones rocosas que el viento caprichoso va modelando con el pasar del tiempo: allí divisamos una piedra con forma de tortuga. Siguiendo camino por la Ruta Nacional 52 se avistan algunos pueblitos como ser Saladillo en donde viven 6 familias solamente. 

Distancia Pedaleada: 120 km

Más Fotos del día 3…




 

Día 4

(Salinas Grandes – San Antonio de los Cobres)

Nos levantamos temprano, un buen desayuno para comenzar el viaje a San Antonio de los Cobres. Los integrantes de la familia Alancay comenzaron a aparecer, Don Miguel y su esposa, Bail y demas eran unos 6 o 7. La esposa de don Miguel se vistió para la ocasión y salió a conocernos. Sacamos unas fotos y le dimos algunos medicamentos para los dolores de cadera de don Miguel. 

Comenzamos a transitar la legendaria ruta 40, el destino San Antonio de los cobres. El camino era todo pero todo, serrucho arena y  piedra, Durísimo muy duro. Todo el camino te acompañan las llamas y burros salvajes que están cerquita de la ruta. Las camionetas de la organización del Dakar nos pasaban a altísima velocidad un verdadero peligro, se creen dueños de la ruta estos tipos.

Todo el día pedaleamos, el camino y los distintos ritmos de pedaleos nos alejaron. Llegue primero a San Antonio de lo Cobres, el negro después y pituco un tanto retrasado dado que las alforjas delanteras juagaron una mala pasada y se hizo el Dr. con un grupo de ciclistas de Bélgica que los efectos de la puna de la zona los tenia a mal traer.

Al llegar a San Antonio de los Cobres, me dirigí a la oficina de turismo, en el bar de la misma tome el café con leche y tostado más rico del mundo.  Estaba literalmente fundido, recupere algo de energías y me fui a la hostería a la espera del negro y pituquin. Ese día los tres estábamos fundidos y con ganas de volvernos a la casa. Decidimos hacer un día de descanso en San Antonio de los cobres para poder encarar el gran desafío del Abra del Acay con más energías y más descansados.

Jorge de la Hostería el agujero, nos atendió como reyes, en el día de descanso nos hidratamos muy bien, comimos de los mejor, guitarreada, caminatas, etc.

 

Distancia Pedaleada: 94 km

Más Fotos del día 4…




Día 5

Descanso muy merecido descanso….

Más Fotos del día 5…




Día 6

(San Antonio de los Cobres  – La Poma)

Llego el gran día, el gran desafío del Abra del Acay (4895 msnm). Desayunamos muy bien, control rutinario de las bicicletas, cargamos mucho líquido, sándwich de Jamón y Queso, frutas, barras de cereal y vamos por el gran de desafío.

Partimos 7:30 de la mañana, el día estaba semi nublado y un tanto frio. De vagos cometimos el primer error, NO AVISAR A GENDARMERIA QUE IRIAMOS PARA EL ABRA DEL ACAY, es muy importante dado que ellos mandan personal a patrullar porque que muchos ciclistas se descomponen por la altura y en ese camino no pasa nadie prácticamente.

Lo cierto es que existen una infinidad de mitos sobre El Abra del Acay y como generalmente pasa con las cosas desconocidas o poco frecuentadas, la mayoría de esos mitos y comentarios son sumamente catastróficos o desalentadores

Es el paso carretero más alto del mundo en una ruta nacional y el de mayor altura fuera de Asia. Para los curiosos, el paso carretero de mayor altura del mundo es el de Semo La en el centro de Tibet con 5.565 m.

Trepamos con muy buen ritmo, paramos varias veces para sacar fotos, reagruparnos, sacar o ponernos alguna prenda, etc. A las 13:30 hs paramos a comer. Por ese tiempo calculábamos que nos faltaban unos 12 km. Los esperamos a los catamarqueños, Esteban y kevin, que venían por detrás de nosotros. Después del almuerzo partimos todos juntos a terminar el desafío, la temperatura comenzó a bajar rápidamente y un poco de lluvia comenzó a aparecer. Personalmente me sentía fuerte física y mentalmente para seguir, es más lo disfrutaba a full.

Luego encontramos a Darío un audaz y solitario ciclista de la plata. El porteño apodado automáticamente estaba fundido se caminó toda la trepada con su bici, lo animamos para que siguiera con nosotros, seguimos los 6 en busca del abra del acay.

Comenzamos a abrigarnos bien, dado que el frio ya castigaba y bastante. La falta de oxígeno nos tenía a mal traer,  el viento nos favorecía en algunas curvas y en otras nos jugaba una mala pasada. Continuamos y los descansos cada vez eran más frecuentes. Muchas  veces pensamos que ya estaba la cima pero no, una ilusión óptica más propia del cansancio.

Dios nos dio las energías necesarias para hacer el último esfuerzo y llegar a  la cima eso de las 16:00 hs. La alegría y emoción no se hizo esperar en el grupo, pero el frio no nos permitió disfrutar de semejante logro. Los -2,5º  en la cima nos castigaba demasiado. Sacamos las fotos de rigor y comenzamos la bajada para aminorar el frio y los efectos de la altura.

La bajada realmente es impresionante, 45 km prácticamente todo en una inigualable bajada, pero la belleza del lugar es un pecado bajar rápido y no disfrutar el paisaje. El camino se encontraba en buen estado, hay varios vados que se forman por el agua del deshielo.

EL objetivo estaba en llegar a La Poma, el paisaje invitaba a fotos en cada metro. Pedaleamos y pedaleamos hasta que tipo 22:00 hs llegamos a destino. Como no encontrábamos el acceso a La Poma improvisamos uno, que rio de por medio nos hizo llegar.

Primer alojamiento que encontramos nos metimos, nos bañamos y disfrutamos de unos milanesas a la napolitana que jamás olvidaré. Brindamos con cerveza y gaseosas el gran día…

Datos útiles sobre el Abra de Acay….

Distancia Pedaleada: 94 km

Más Fotos del día 6…




Día 7

(La Poma – Cachi)

Relajados de haber cumplido el gran desafío, descansamos muy bien dado que el día anterior fue realmente agotador, limpiamos las bicicletas y salimos cerca las 11:00 de la mañana en busca de fiambre y frutas para el camino. El próximo objetivo era Cachi. Salimos en grupo los catamarqueños Esteban y Kevin, el porteño Darío y el Team Charata. Disfrutamos mucho el viaje broma va broma viene, pedaleando liviano como quien aflojar las piernas. Como no teníamos alojamiento en Cachi, decidimos molestar a Jorge de la hostería el Agujero y como siempre con mucha amabilidad nos consiguió un Dpto. en Cachi. Por el Dakar el pueblo estaba lleno de gente y llegar y ponerse a buscar no era una buena idea, pero Jorge nos solucionó el problema.

Como andábamos sobrado de tiempo decidimos  parar a comer unos sándwich en Los Graneros, caminamos unos 400 mts por el lecho de un río hasta llegar al lugar así nombrado. En el existen protegidos unos Graneros Incaicos que usaban aquella civilización para moler maíz. Estos quedaron protegidos por encontrarse dentro de una caverna rocosa.

Al llegar a cachi Don Jorge Figueroa padre de Jorge nos estaba esperando y gentilmente nos acompañó al Dpto. Los Catamarqueños hablaron con el dueño y durmieron bajo una galería. Esa tarde como quien salir a caminar y buscar donde cenar nos enteramos de los corte de rutas por el Dakar.

Decidimos  que al día siguiente saldríamos con rumbo a Cafayate y meterle hasta donde podamos o los cortes por el DAKAR  no permitiesen.

Distancia Pedaleada: 60 km

Más Fotos del día 7…




Día 8

(Cachi – Animaná)

Al dejar Cachi, teníamos por delante un trayecto de gran belleza natural con algunos pueblos donde el tiempo parece haberse detenido. Fueron en sus inicios parte del asentamiento de las fuerzas españolas en el Norte argentino y luego, con las misiones jesuíticas, se edificaron sus iglesias y algunas casas que aún permanecen.

Seclantás, Molinos, Angastaco, San Carlos y Animaná se asientan en esta ruta zigzagueante que en algunas partes es de ripio, en otras de arena o tierra.

La Quebrada de las Flechas tiene unos veinte kilómetros de extensión, entre Angastaco y San Carlos. A ambos lados del camino observamos esos extraños afloramientos rocosos inclinados, producto de los movimientos del suelo y los vientos a lo largo de miles de años. Formados por areniscas, sus colores varían entre grisáceo y ocre rojizo y nos produjeron un fuerte impacto visual. 

Salimos tipo 8 am por la ruta 40 con destino a Cafayate, la ruta que nuevamente presentaba mucho serrucho, arena y piedra. Pasamos por Seclantas donde hicimos un lindo picado para continuar viaje hasta molinos. Llegamos a Molinos a las 14:00 y el corte de ruta venia por detrás de nosotros. Si el corte nos agarraba quedábamos un día parado sin poder movernos del lugar. Decidimos buscar una camioneta que nos acerque hasta el próximo pueblo (Angastaco) para continuar desde allí el pedaleo hasta San Carlos o Cafayate para evitar el corte de ruta. Dado la hora y las inclemencias del tiempo nos acercaron hasta cerca de San Carlos.

 

Armamos las bicis y llegamos a San Carlos, era impresionante la gente por el Dakar y por el festival del pueblo. El camping totalmente colapsado, la policía no nos daba lugar en el patio de la jefatura para tirar la carpa. Un hombre que gentilmente nos prestó su patio para acampar nos aconsejó llegar hasta el próximo pueblo para evitar con más seguridad el corte de ruta. Seguimos hasta Animana un pueblo hermoso y tranquilo donde tampoco había lugar para las carpas ni mucho menos alojamiento.  Los cata hablaron con una señora que tenía un bar en una esquina donde había un tinglado, ella gentilmente nos dejó poner la carpa pero después de las 23:30 hs. Dado que esa hora ya no tendría clientes del bar. Cenamos ahí unas ricas humitas en chala y Sándwich de milanesa.

Armamos las carpas, el baño quedo para otra oportunidad y a dormir se dijo. Obviamente al acostarnos comenzaron las bromas de los changos, era una carcajada tras otra. Hermosa noche a pesar de los duro del piso.

Distancia Pedaleada: 100 km

Más Fotos del día 8…




Día 9

(Animaná – Amaicha del Valle)

Partimos tipo 9:00 hs hacia Cafayate, la ruta muy transitada por la gente que fue a ver el Dakar. Llegando a Cafayate una multitud de gente que esperaba el Dakar nos recibió con muchos aplausos y algunos con cargadas… Paramos en la plaza  principal como quien comer algo e hidratarnos. Partimos hacia Amaicha del valle, en Tolombon nos quedamos a almorzar unas empanadas, mientras veíamos pasar los autos del Dakar.

Seguimos camino hacia Amaicha, y llego el momento de despedirnos de los amigos y compañeros de ruta, ellos siguieron su camino por la ruta 40 y nosotros tomamos la ruta provincial número 307 que nos lleva hacia Amaicha del valle.

                Hicimos unos km por la RP 307 y nos agarró una linda tormenta con gotas que parecían piedrazos, a pocos metros divisamos una garita donde pudimos refugiarnos hasta que pase la tormenta. Seguimos pedaleando más que relajados hasta llegar a Amaicha donde nuevamente nos esperaba gente en el ingreso a la ciudad por el paso del Dakar. Gracias a Dios conseguimos alojamiento en un hotel, estaba todo lleno.

                Un buen baño, y salimos a caminar por el pueblo como quien hacer las compras para el día siguiente y aflojar las piernas.

Distancia Pedaleada: 130 km

Más Fotos del día 9…




Día 10

(Amaicha del Valle – Simoca)

El domingo deberíamos sortear el último obstáculo en las alturas, subir el infiernillo (3042 msnm). Este  une Tafi del Valle con los Valles Calchaquíes. Posee uno de los más encantadores paisajes de la zona. Se pueden apreciar durante su recorrido diferente tipo de vegetación, así como una fauna muy variada.

Nos levantamos tipo 6:00 am, para desayunar y acomodar las cosas y poder partir cerca de las 7:00 am. Para poder evitar el calor. Pedaleamos a un ritmo muy tranquilo rodábamos muy distendidos, la verdad que no sentí la trepada, no me pareció complicada. Llegamos a la cima, ahí como siempre algo de viento, lluvia y frio. Sacamos unas fotos y emprendimos la hermosa y espectacular bajada hacia Tafi del valle. Llegamos cerca del mediodía, no entramos al pueblo seguimos derecho por la RP 307 y paramos en un bar cerca de El Mollar. 

Almorzamos unas empandas de entrada y luego unos tallarines. Comenzó una llovizna, muy común en la zona. Cerca de las 15:00 emprendimos el viaje nuevamente, el objetivo era llegar a concepción de Tucumán. Por primera vez, al menos yo, emprendimos la bajada de Tafi del Valle, verdaderamente hermosa, un tanto peligrosa por los vehículos nada más. Paramos en el indio para picar alguito cargar agua y seguir hasta concepción.

                Bajando a concepción nos dimos cuenta que estábamos cerca el pago ya, el calor y la humedad se hacían sentir y bastante. Llegamos a concepción cerca de las 18:00 hs. Nos alojamos en una casa de Flia. Que alquilaban piezas.

                Un merecido baño y salimos a caminar por la plaza principal disfrutando de la última tarde noche juntos. Comimos unos lomitos y mexicano acompañados por un par de cervezas negras. Luego nos fuimos a dormir para recuperar fuerzas y poder emprender el último día de pedaleo.

Distancia Pedaleada: 150 km

Más Fotos del día 10…




Día 11

(Simoca – Santiago del Estero)

Emprendimos el último día muy ansiosos, los tres ya extrañábamos mucho a nuestras familias y no veíamos la hora de llegar al pago ya. Partimos muy temprano tipo 6:30 de la mañana porque el calor nos castigaría muy duro durante la jornada. Considero que fue la jornada que menos disfrutamos el paisaje, dado que no hay mucho por ver y el calor te va desgastando de a poco.

Pedaleamos parejo y sin descansar por la RP 209 hasta el límite de Santiago del Estero con Tucumán. El calor era insoportable, no recuero cuantos grados pero se sentía y mucho. El límite interprovincial esta la policía donde paramos para cargar agua, refrescarnos un poco y seguir hasta Villa Rio Hondo donde pararíamos a almorzar.

Decidimos seguir hasta la estación de servicio YPF que está en la RN 9 a la salida de Las Termas de Rio Hondo. Comimos algo liviano y mucho muchísimo líquido para evitar la deshidratación y posterior fundida. 

Ya estábamos a 60 km de la meta y de cumplir el gran objetivo, unir La quiaca con Santiago del Estero en Bicicleta. Retomamos la RN 9, muy peligrosa para los ciclistas no la recomiendo para nada, nos turnábamos para ir tirando y el último daba la orden de bajar a la banquina cada vez que venía un camión. El promedio bajaba cada vez más, el calor nos destrozó y la ansiedad de llegar lo más rápido posible nos fundió más de lo debido.

En Belgrano y Antenor Álvarez nos esperaban nuestras familias y amigos. Al momento de la llegada me invadió una sensación de felicidad y emoción muy difícil de controlar. Cuando más pasa el tiempo, valoro más lo que hemos hecho. Creo que somos los primeros ciclistas de Santiago del Estero de en hacer una aventura así, recorrer 1200 km en 11 días, atravesando cuestas como el Lipan (4170 msnm), El abra de Acay (4895 msnm), el Infiernillo (3042 msnm).

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La verdad no sé, si la vida me dará otra oportunidad de realizar una aventura de esa naturaleza…. El tiempo lo dirá, por lo pronto lo disfruto y cada día que pasa valoro más lo realizado.

Eternamente gracias a mi amada esposa Maricel por hacerme el aguante y permitir que ese sueño se cumpliera. A mis hijos por acompañar a su madre en mi ausencia y a toda mi familia y amigos que nos alentaban día a día.

Cuando planificábamos el viaje, solo quería viajar y conocer, nunca creí que esta aventura iba a significar tanto para mí…  Es una necesidad para mí agradecer a ustedes Walter Mendieta (Negro) y José Ramírez (pituquin)  por todo el apoyo y contención en este viaje de 11 días que fue un sueño cumplido y que ha superado altamente mis expectativas. Hasta el reencuentro!!

Distancia Pedaleada: 204 km

Más Fotos del día 11…

 

Videos varios de todo el viaje…

Villa Jardín de Reyes – Laguna de Yala-Lozano

En enero del año 2011 nos fuimos de vacaciones para Jujuy con la Flia. Y como para matizar un poco la misma decidimos llevar un par de bicicletas de MTB, una DiamondBack de mi propiedad mía y otra me presta mi gran amigo Javier.

Alquilamos una casa en Lozano, un pintoresco pueblo ubicado a 25 km de San Salvador de Jujuy. Salimos con mi hijo Santi a dar unas vueltas cortas por los alrededores de Lozano. Hermoso lugar para pedalear con mucha montaña que te sacan el aire pero se disfruta y mucho.

Decidí intentar una salida un poco más exigente, partí en solitario a la Laguna de Yala desde Lozano. Tomé la ruta Nº 9 hasta la localidad de Yala (5 km) y empalmando con la Ruta Provincial n°4  llegas a Los Nogales, luego, tras cruzar el Río Yala por el Puente Negro, se accederá al parque, por un sinuoso camino de montaña de alto valor paisajístico. Ahí, comienza la verdadera y  Hermosa trepada que te saca el aire varias veces, pero con paradas  de tanto en tanto e insistiendo y siendo constante llegue  a la laguna de Yala. Está se encuentra a una altura promedio de 2300 m.s.n.m, se resguarda una zona de bosques montanos y pastizales de neblina de las Yungas. Existen otras lagunas para visitar haciendo trekking que en su conjunto se llaman Lagunas de Yala. Se trata de seis espejos de agua llamados Los Noques, Larga, Alizar, Comedero, Desaguadero, Rodeo, de las cuales solo las tres últimas son accesibles.

Al llegar a la laguna me hidrate con una gaseosa, saqué un par de fotos y emprendí la frentica bajada, todo iba de maravillas disfrutando a full la bajada pero con las precauciones del caso hasta que la cubierta delantera se destalono y no pude continua. Por suerte solo un pequeño susto. Trate de inflar de nuevo pero era imposible, emprendí la caminata para llegar a Yala, pero siempre un ciclista encuentra alguna mano salvadora,  una pareja que bajaba en una camioneta se ofreció a llevarme hasta Yala a la cual accedí gustoso.

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No conforme con la trepada a la Laguna de Yala, emprendí una vuelta más exigente, saliendo desde Lozano por ruta nacional nro. 9, llegar a Villa Jardín de Reyes, laguna del comedero, laguna de Yala, Yala y Lozano. Una vuelta de unos 80 Km, con trepadas lindas, bajadas hermosas y paisajes sin igual.

                Comencé un poco temeroso dado que transitar por la ruta nacional nro. 9 no es del todo seguro. Al llegar a Villa Jardín de Reyes todo cambia, entras en una tranquilidad y un deleite paisajístico sin igual. Verdes de diferentes tonalidades se elevan y bajan al ritmo que le imponen los cerros pintando un hermoso paisaje en el que aparece Villa Jardín de Reyes.

                Llegue a la hostería, cargue un poco de agua, seguí unos metros más adelante hasta el puente que se eleva sobre el rio Reyes. Descansé unos minutos como quien disfrutar el paisaje y el aire fresco y emprendí la trepada que te lleva a la laguna del comedero, dura trepada pero sin desesperarse uno puede avanzar a un ritmo que permite apreciar la belleza del lugar.

 

Sabía que el camino estaba cortado para el tránsito de automóviles dado a los derrumbes ocurridos en la zona, pero nunca me imaginé que el camino literalmente desapareció y no se podía pasar por ahí ni si quiera caminando. Me detuve mire y decidí no volver, aquí paso como sea dije porque no sé si algún día podre volver hacer ese hermosa vuelta en bicicleta. Ate la bicicleta con las tiras de la mochila y comencé a bajar hacia el precipicio unos o 20 metros donde recién podía esquivar las piedras del derrumbe y luego subir de nuevo hacia el camino. Gracias a Dios todo salió bien pero fue un riesgo grande que tome, no me arrepiento pero no se si lo haría de nuevo.

Una vez retomado el camino, este se presta para andar rápido. Seguí pedaleando con buen ritmo sin arriesgar nada para llegar sano y salvo. Un par de fotos en la camino y continuar hasta llegar a la laguna de Yala, un pequeño descanso controlar la bicicleta sobre todo los frenos y presión de en la ruedas y comenzar la frenética bajada que había quedado inconclusa unos días atrás.

Rescato de estas pedaleadas, paisajes hermosos que ofrece Jujuy, lugares incomparables para pedalear sobre todo para aquellos que nos gusta la montaña.  Al mismo tiempo evitar estas pedaleadas por lugares apartados en solitario donde existen bajadas peligrosas y derrumbes. Cualquier cosa nos puede pasar, no estamos exentos de nada y en compañía de alguien uno se siente más seguro y relajado.

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